Acuicultura
Desafíos
La acuicultura se enfrenta al reto de gestionar los residuos biológicos de forma rentable. Además, los residuos de pescado y marisco huelen mal. Los retos son las tasas de entrada y los costes de llevar los residuos biológicos a los vertederos. El aumento del precio de la energía también es un problema. La falta de espacio para los residuos biológicos también puede ser un problema.
Biorresiduos
Los residuos de pescado y otros mariscos también pueden utilizarse como materia prima para la planta de biogás FimusKraft. ¡Gane dinero con los residuos y el material sobrante de su biomasa!
¿Qué puede ofrecerle la Planta de Biogás FimusKraft (FKBP)?
En muchas zonas costeras hay cada vez más piscifactorías. Si las éstas son pequeñas, podrían recoger los residuos de pescado en un solo lugar para obtener suficientes residuos biológicos para el proceso de fermentación. Cada módulo del sistema FKBP produce un mínimo de 30 kW de electricidad, que puede utilizarse para alimentar la red con bioelectricidad. La necesidad de electricidad para cargar la maquinaria, la iluminación y el funcionamiento de los procesos puede cubrirse con esta bioenergía. Por lo general, cada módulo produce un mínimo de 60 kW de calor, que puede utilizarse en los procesos y para calentar los edificios.
El proceso de fermentación convierte los residuos biológicos en biofertilizantes ricos en nutrientes, con un alto contenido en nitrógeno y fósforo. El tratamiento posterior a la fermentación produce biofertilizante de alta calidad en forma sólida y líquida. Este biofertilizante puede venderse a los agricultores.
Obtenga beneficios de sus biorresiduos
En función de su contenido, los biorresiduos marinos pueden ser una valiosa fuente de materias primas para las industrias farmacéutica, alimentaria y química. Si se solicita, FimusKraft realizará las pruebas y, si los resultados son positivos, el desarrollo de estos materiales se incluirá en el sistema FKBP. La venta de este producto secundario aumenta la rentabilidad de la empresa, lo que implica un ingreso extraordinario. Con el sistema FKBP puede disponer de electricidad y calefacción para sus instalaciones.
Cuando la empresa gestiona los biorresiduos localmente, se ahorra los costes de transporte y evita las tasas de entrada. También es una forma respetuosa con el medio ambiente al gestionar los residuos allí donde se generan. También se reduce la huella de carbono y las emisiones de gases de efecto invernadero. En definitiva, el sistema FKBP es una forma ecológica de gestionar los residuos.
